Publicado por Ricardo Alonso Maturana
24/08/2011
Recientemente he redescubierto las utilidades de un sistema de computación llamado GRID y que, aunque no esté tan de moda como la nube, es una de esas maravillas que el ingenio humano y la técnica pueden hacer. Para explicarlo de la manera más sencilla posible la idea consiste en que un trabajo de computación complejo (calcular números primos, análisis de secuencias grandes...) en vez de ejecutarse en un solo ordenador muy potente, se parta en trozos más pequeños y se distribuya entre muchos ordenadores más pequeños. Gracias a que estas iniciativas se han impulsado principalmente en ambientes científicos y basados en software libre, se han difundido, aunque no popularizado lo que sería deseable...
Categorías
Etiquetas